No es lo mismo correr en una superficie que en otra, por eso acá los pro y contras de cada terreno y algunas recomendaciones para mientras entrenas.
Arena
Pros
- Es una superficie blanda y de bajo impacto.
- La amortiguación es máxima.
- Tus piernas se fortalecen más.
- Se gasta dos veces más energia que en otra superficie.
- El esfuerzo que se realiza sobre todo al levantar el pie es muy grande y la carrera se vuelve más fatigosa.
- Terreno inestable; aumenta la probabilidad de sufrir torceduras.
Pros
- Son los suelos más estables, por lo tanto logramos más velocidad y menos lesiones por torción.
- Ofrece poca resistencia a la zancada.
- Suelen ser lugares concurridos, lo que motiva a seguir corriendo
- Mayor impacto en rodillas y tobillos por la dureza del terreno.
- No existe amortiguación por lo tanto debe ser regulado con el uso de zapatillas con buena amortiguación y absorción de impacto.
Pros
- Es una superficie de dureza intermedia entre el asfalto y el césped.
- Las zonas por donde se corre suelen ser muy motivadoras.
- Propicio para hacer cuestas.
Contras
- Peligro de piedras y ramas sueltas.
- Cuidado con las bajadas pronunciadas.
Pros
- Terreno ideal para largas distancias, ya que hay un buen equilibrio entre las fases de apoyo e impulso.
- Recomendable para comenzar a correr o para la rehabilitación de cualquier lesión deportiva.
- Es una superficie blanda muy compleja porque muchas veces posee irregularidades que no se ven –pozos- y que aumentan las probabilidades de lesiones por torción como los esguinces de tobillo.
- Según las condiciones climáticas, puede estar mojado o con rocío; ¡Cuidado con los resbalones!
Y vos.... ¿Qué circuito elegís para entrenar?
fuente: www.nikecorre.com